Breve analogía sobre el futbol y el amor…
"Aquello de que más seguro estoy acerca de la moral y de las obligaciones del hombre, se lo debo al futbol"
-Albert Camus-
¡Ahhh el futbol! No
hay nada más bello que pisar el campo sagrado, puedes pelotear en diferentes
tipos de terreno, con balones de diferentes formas, materiales e incluso
imaginarios, con un único objetivo, meter la bola en la portería. Este
rudimentario juego sólo te permite dos
opciones, acabar el juego con una sonrisa o con una lágrima, esperen… ¿Acaso el
futbol es igual a lo que los humanos llamamos amor?
Pues sí, el historial en el amor es comparable con la
carrera de los futbolistas, les narraré la mía que afortunadamente a mis 32
años sigo activo (N.A. Pero al igual que el Kaiser de Zamora, me lesiono
después del silbatazo inicial).
1.1 El balón es tu amigo
A los 16 años era un jugador amateur, me invitaban a jugar
retas, pagaba arbitraje y metía goles donde podía, solamente por diversión,
nada de compromiso (yo pude ser mejor actor que Ron Jermy, pero me lesioné la
rodilla). En esta etapa el resultado no importaba, lo valioso era competir,
divertirse, burlar rivales, hacer truquitos y goles, entre más partidos jugaba
era mejor. Veía a algunos amigos que
fichaban con un Club que les daba estabilidad, yo sabía que mi momento llegaría…
1.2 El equipo
formativo / Debut
Fui fichado a los 18 años en la universidad, mi primera
novia formal me daba un contrato sin sueldo pero con muchos sueños. Mi juventud
e inexperiencia en el juego creaba imágenes donde yo hacía historia en ese
primer Club, (tipo Maldini que debutan y se retiran en el mismo equipo,logrando que la tribuna ponga su cara en un mosaico en San Siro). Ella me dió
la oportunidad de probar las mieles del debut en las relaciones (regalos,
suegras, cuñados, celos) sin embargo, una nueva oportunidad llegó y emigré,
aunque tu primer Club siempre estará presente en tu corazón…
1.3 El sueño Europeo
Tuve la oportunidad de tomar una beca en Europa, digamos que
para evitar el albur me fui a jugar al Anderlecht, ahí obtuve el cariño del
público y entablé relación con un nuevo Club, era otro tipo de juego, toda muy
rubia, toda muy blanca, pases largos,
camisas largas, sostuve esta relación durante dos años, gané algunas ligas (en
ese entonces Jupiler) y participé en la Europa League, aunque lo mejor estaba
por venir…
Aquí una foto de stock cuando iba a San Guido a ver al Anderlecht. Esta ocasión venció a Mons 3-1 |
1.4 The Champiooons
Después de campañas regulares siendo titular en Europa, un
equipo “grande” se fijó en mi, una chica dedicada a la producción televisiva se
había enamorado de este muchacho con pelos de Saiya-Jin, era como el Chicharito
en el Madrid,(nadie se lo esperaba y la mayoría decía ¿cómo ese wey?) en los
primeros meses todo fue diversión, entrevistas, visitas a hospitales, fotos,
portadas. Los resultados se estaban dando, tres ligas ganadas al hilo, dos Champions,
una copa, pero mis problemas con su directiva (mi hija se merece a un jugador más guapo, a un jugador que gané
más) y con la tribuna (osea, como ese tipo puede ser el goleador de mi besty,
cero que ver) hicieron que la relación fuera decayendo. Aún así le puse empeño,
entrené y me esforzaba, quería retirarme en ese club, pero los medios de
comunicación inflaron reportes de que estaba siendo tentado por otros Clubs logrando
que rescindieran mi contrato y tuve que regresar a la liga local, a la siempre
gris Liga Bancomer MX…
1.5 El equipo exótico y el posible retiro
Estuve sin Club fijo durante algún tiempo, deambulaba como
el Kikin buscando oportunidades (igual presumía mi año y medio en Europa),
había acercamientos con directivas de Clubs de tabla media baja, con algunos
llegué a hacer pretemporada pero al final ya tenían otro goleador en la mira o
decidían renovar contrato con el delantero que había fallado en temporadas
pasadas (Como Torres en el Aleti) , finalmente ninguno de estos Clubs me llegó
a convencer, estaba a punto de irme a probar suerte al Comunicaciones de Guatamala hasta que llegó la liga exótica, una liga en crecimiento en forma de
diseñadora de 23 años (9 años menor que yo) me invitaba a retirarme en su
equipo, señores , firmé con el Guangzhou Evergrande.
Esta es una liga que desconozco, hay diferencia de edades,
gustos musicales, (mis chistes son viejos y mis amigos panzones), sin embargo, hay algo mágico y especial, me
miran con atención y estoy presente en todas las ruedas de prensa (el instagram
del Club es un monumento a mi fichaje). Cada día aprendo más y me divierto, he
vuelto a ser el jugador amateur que sonríe ante el juego, aquel que no teme
cobrar un tiro libre, que siempre pide la bola, que busca y encara. Mi equipo actual
me enseña cada vez más novedades (como snapchat , youtubers, bares) y yo
aprendo y me divierto. He dejado atrás las glorias individuales para conocer y disfrutar de esta nueva etapa,
el juego volvió a ser divertido y no me molestaría retirarme en este Club...
Es divertido pensar en el amor de esta manera, aunque ustedes no estén
fichados en este momento, seguramente un Club tiene interés por ustedes (si no,siempre estará el Coyotes Neza), vean sus opciones y no se queden como Pulidosin jugar. Como consejo final les
recuerdo que en caso de empate, la diferencia de goles es la que cuenta…
¡Feliz 14 de febrero!
El autor de este post es aficionado a las Gloriosas e Indestructibles Águilas del América y al AC Milán, gusta de comer hamburguesas y tlayudas, si algún día deseas invitarle un pulque, puedes localizarlo en twitter como @cuauchenko.
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